Por motivos externos como la ingesta de un medicamento específico o la sanción de unas cicatrices recientes, muchas pacientes tienen que interrumpir las sesiones de depilación láser. Lo cual es una decisión que no es precisamente dañina, pero si es bastante contraproducente.
Desde nuestro centro de depilación láser te explicamos las incómodas situaciones que se desarrollan a partir de esta interrupción. Y así podrás estar al tanto de las consecuencias que enfrentarías si por algún motivo te ves obligada a frenar temporalmente las sesiones de depilación láser que tienes pendientes:
1. Se reinicia el ciclo del crecimiento del vello
Para empezar, debemos aclarar que la cantidad de sesiones que se determinan para un tratamiento completo de depilación láser depende de factores muy individuales. Tales como al área del cuerpo en la que se realiza, o la fisionomía capilar del paciente.
Esto por el hecho de que las zonas hormonales tienen condiciones más delicadas, mientras que el grosor y la abundancia natural del vello también es algo decisivo.
De modo que, en la mayoría de las ocasiones, la primera consecuencia de interrumpir las sesiones de depilación láser sería el reinicio del crecimiento de los folículos capilares que estaban cerrándose con el tratamiento. Y dependiendo del lugar, este retorno del vello podría ser de mayores o menores dimensiones.
2. Ese mismo vello podría engrosarse
Durante los tratamientos de depilación láser está indicado que, para fomentar la rapidez de los resultados, es necesario afeitarse para engrosar el crecimiento del vello restante.
En consecuencia, al interrumpir la secuencia de las sesiones restantes, quedas con un crecimiento de un folículo mucho más grueso, e incluso con un nacimiento acelerado. Lo cual ocurre tomando en cuenta que muchas veces el rasurarse incentiva el crecimiento capilar.
3. Habría que formular un nuevo esquema cuando lo retomes
Como el ciclo del crecimiento se desajusta y las dimensiones de ese nuevo vello corporal también son diferentes, es casi seguro que se tendrá que plantear un nuevo esquema de depilación láser. Es decir, se podrían requerir más sesiones de las se necesitaban antes de la interrupción.
La duración de esta brecha entre sesiones también es un detalle influyente, ya que mientras más pasa el tiempo, más se agrava todo el tema del engrosamiento capilar.
Si has tenido que interrumpir las sesiones de depilación láser recientemente, pero estás interesada en retomarlas cuanto antes, no dudes en contactar con nosotros. Estaremos encantados de poder ayudarte a completar tu tratamiento para que puedas disfrutar de una piel suave y completamente libre de vellos.